Piñera fue defendido por Monckeberg. Con papeles en mano, Monckeberg afirmó:
“Han dicho que Sebastián Piñera no es doctor en economía, y aquí consta el título en que Sebastián Piñera es doctor en economía de la Universidad de Harvard; dicen que Sebastián Piñera no ha hecho clases en la Universidad de Harvard y aquí consta el certificado de la propia universidad que reconoce su calidad de profesor; han dicho que Sebastián Piñera no fue el mejor alumno de la clase y, sin embargo, no hay ningún certificado de la Universidad de Harvard que diga que Sebastián Piñera no tuvo puros sietes, es decir, puras A”.Pues bien, el mismo, que le pidió a la U de Chile (grande!) una aclaración sobre la supuesta licenciatura en F-I-L-O-S-O-F-I-A de la (ahora) ex directora de ChileRecortes, es quien se ve en aprietos.
Lo que no es verdad. Todos saben que Piñera no es Ph Doc ni en Chile, Harvard o Caburga.
Salió, ya en Octubre de 2006 [Nota: Que tal el periodismo investigativo en Chile? Un pooooco lento...], en Noticias Secretas que el Monckeberg andaba luciendo ropa robada. Según el mismo, y mucho más importante en su página web, era -nada más y nada menos- un chico Ivy League de Harvard. Y náquever eso de mezclar un título de un centro de extensión/estudios continuados con la mismísima Haaaarvard. Picante. Y según el Premio Tarro de la Curves Pato Navia, ni siquiera estuvo presente. Hizo sus estudios siendo concejal (subida de cejas).
Y así no funciona el Harvard de Verdad (y no el otro que opera en la mente alegórica de un grupo de chilenos). Es redificil entrar porque hay ciertos criterios para seleccionar a los alumnos. En el caso de Monckeberg -previo pago de sus cursillos- su megadiploma (enmarcada en caoba sobre passpartout sin químicos) de dimensiones desproporcionadas, es como decir que estudiastes 5 (!) años en Filosofía (mamándote cada cierto tiempo paros & cosas por el estilo) en la Chile.
Lo que nos lleva a la mentira más rasca de la Historia de Chile. La Depassier -al ocupar el cargo de directora de ChileRecortes- inmediatamente levantó sospechas. Por las cosas que decía. No hilaba muy fino, no se sabía la diferencia entre la realidad inmediata y la realidad mediada (Filo 1) ni tampoco sabía sumar (algo cada vez más frecuente entre los ministros, Hola Velasquín! Sigues en Hacienda?). En limpio, sonaba tonta (juicio objetivo basado en estudio empírico en terreno, Chile, Dic-Ene, 2006/2007). Estamos seguras de que eso fue lo que impulsó al Monckeberg a pedir sus antecedentes además de que 'hay que ser uno para conocer uno', o en buen castellano, entre brujas se ven la suerte...
Y pensándolo, ni el Monckeberg o Piñera tienen pinta de Ivy League boys. Y no importa cuantas veces salga con su diploma grotesco en la tele. El Monckeberg insiste en que "puede mostrar el título que probablemente la subsecretaria no puede mostrarles" y que "hay una modo de empate" en la política chilena. Declaraciones poco académicas de alguien que supuestamente estudió 2 años para un Master. Y que aún, y ahora que se inicia el Foro Mundial de Economia en DAVOS, participa bajo su título usurpado además de ganarse un espacio en la lista esa de "100 lideres mundiales" del WEF.
Y claro, si hay que mentir (como nos dijo una amiga), hay que mentir bien y grandilocuente y no darse de "filósofa" (un título profesional que no existe en Chile) rasca. Mucho mejor darselas de harvardiano...aunque uno ande a patadas con el inglés.
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