El eterno pie de página del siútico Brunner

El flojo Brunner (que oportunamente aparece cuando se habla de la deseducación chilena desastrosa para defenderla) nunca se dignó de presentarse a la Comisión Educacional (por 'viajes al extranjero', ergo, intercambiar el invierno smogoso de Santiago por el calor del verano parisino). Y no tenía porque hacerlo ya que, acorde a su plan, dias antes de que se le presentara a la presi las 'conclusiones' -llamadas 'mediocres' por los avispados voceros secundarios-, Jean Jacques Brunner no encontró nada mejor de lanzar una magna obra sobre el trabajo de la Comisión en pos de 'negociar' al más puro estilo de vendedor de autos usados. Un texto recibido por Peña y unos cuántos más que es muy aburrido y que no aporta nada nuevo al hundirse en su propia grandilocuencia verbal e insportable.

Así fue como por sobre las cabezas de los chicos -que si han calentado las sillas del Ministero de Educación y no son unos siúticos- secundarios, el Peña llegó a un acuerdo de incluir los pie de páginas innecesarios brunnistas.

Es que había una fuerza demasiadamente 'estatista' que manchaba el texto con exigencias de una 'educación de calidad verdadera' y que amenazaba con forzar las políticas educacionales con partir de cero. Es decir, como alguna vez fue la cosa. Antes de la Constitución de 1980, las metidas de mano de la Concerta, de los 'policies' desastrosos...(Gracias Brunner, Lagos, Bitar y etceteras).

De esta manera hemos entrado a una nueva era, la decadencia de los 'intelectuales chilenensis'. Especie en plena extinción. Por viejos y rebuscados. Por copiones y mucho más.

Solamente los pinguinos se han dado cuenta de que los responsables querían y quieren pasar un cierto gato por liebre. Y después de todo, son ellos que reciben la deseducación. Por eso, con mucha valentía, se enfrentaron esas mesas y sillas fiscales de las salas de reunión del Ministerio. Para demostrar que no importa si los invitan ni que los hagan estampar sus firmas en documentos que poco o nada inciden sobre los asuntos educacionales del país ya que siempre en la democracia chilena, se negocia a escondidas.

Por arribista cayó el Brunner. Por ser su amiguito, desnudaron al Peña.