Y nos informó que se lo comía enterito. Y que de hecho, las Curvas "devoró" parte del último animal "solo ayer por la noche...¿o no te acuerdas?"...Bambi nos tendrá que perdonar.
Bueno, en Chile -país de la hiper evolución humana- justo antes de las fiesta navideñas, algunos municipios no tienen nada más que hacer, que matar A LA MALA a los "perros vagos". Qué las salud local, la posta, el educación, los colegios y la delincuencia...pasa a segundo plano con las ultimas redadas.
Debemos hacer una pausa para explicar (algo que de seguro no solo ocurre en la capital pero es lo que hemos visto) que los quiltros (mutts) chilenos son de lo más BRILLANTES.
Entre tanta infelicidad que polula en el centro de Santiago, si uno presta atención, los chicos vagos siempre te regalan una sonrisa y si tienes suerte, una movida (desde lejos) un tanto cuidadosa, de la cola. Y por cada protesta/marcha/celebración, ahí están presentes.
Bien dijo alguien que la movida de cola no se puede comprar.
Hace ya tiempo, Pepa lleva denunciando el maltrato y la muerte lenta que el municipio de Viña del Mar le da a los perruños. Ahora, resulta que lo que se cree es una organización preocupada por el bienestar de las mascotas abandonadas, la Sociedad Protectora de Animales, tiene un asco de operación. Ni pensar en la cantidad de dinero que recibe la mal-llamada "Protectora". Además, también en las municipalidades de La Florida y Puente Alto, la cosa está grave.
O sea, mejor no hacer alusiones a la inclinación pertidaria de tales alcaldes...
Basicamente se trata de una POLITICA de EXTERMINIO de aquellos animales que no cumplen con los requicitos de ser de pura raza. Asimismo, demuestra hasta que punto el interés personal está por sobre el interés colectivo.
Este tipo de política es solo un ejemplo de cuando "CURAR" se impone por sobre "PREVENIR Y EDUCAR".
Y nos suena a conocido. Ya CONACE lo implementó con pésimos resultados en cuanto a su ridícula campaña en contra del uso de drogas.
Pueden apoyar la causa pinchando acá.
Foto: El Gato Samba, medio hermano de Voltaire y orgulloso gatuno de San Ramón.