6.9.08

Cuestión de Imagen 1

De a poco ha surgido una especie de mea culpa coordinada entre ciertos personajes en Chile, algo tremendamente nocivo para el presente del país. Sospechamos que ya hay 'talking-points' repartidos para que se difunda una NUEVA forma de ver la Historia...tan cerca de otro oncedeseptiembre y de las elecciones.

Y veremos que no es casual.

La empresa (o mejor dicho, subsidaria comunicacional de la CONCERTACION) EL MERCURIO decidió publicar dos entrevistas en el día de hoy: una al ministro de relaciones exteriores Foxley y otra, al zar de IMAGEN PAIS, Juan Gabriel Valdés.


Foxely declara que:
"el estilo de hacer política está dañando la imagen del país en el exterior" y que "seguir con estas peleas políticas que estamos observando todos los días en Chile, este regreso a la política de la confrontación, que tan caro le costó al país a comienzo de los años 70. Este grado de intolerancia, este deseo de apabullar y sacar del camino al que piensa distinto. Ése es el peligro máximo que tiene en este momento".
De la forma más simplona, Foxley liga la supuesta IMAGEN de Chile en el exterior con el modus operandi local de la politiquería. Es decir, y según el canciller, PORTARSE BIEN es la atracción misma para seducir las inversiones extranjeras. Y por subsiguiente, PORTARSE MAL (o disentir o no acatar, "tonterías" lo llama el buen economista), convierte a Chile en un asco.

Nada más equivocado (para variar).

Valdés dice algo parecido:
"Hay una situación política, que se alimenta y se reproduce al interior de la clase política, que lleva a una situación de deterioro de las expectativas que los chilenos tiene de su propio desarrollo. Nosotros queremos abstraernos de eso, de esta crispación política que no responde a nada real".
Pero Valdés va más allá y al estilo de Freud asegura que:
"Es un país que no se quiere a sí mismo. Por lo tanto, mal puede contar hacia afuera si lo que dice de sí mismo es crítico y auto flagelante".
La "lógica" de Valdés también apunta a que el show político es el culpable de la también supuesta auto-percepción chilena y que "lo que se cuenta afuera" es casi digno de 10 palmadas públicas en la plaza de armas...

La falta de conocimiento ha llegado a nuevos niveles de ridiculismo y megalomanía de la antigua guardia de la CONCERTACION.

Foxley sabe muy bien que los dimesydiretes internos ni son seguídos en el mundo. No porque Chile no importa sino porque el planeta es grande y hay millones de situaciones diarias que copan la agenda mediática. O sea, quién está a cargo de la representación del país en el exterior (con toda la flota de diplomáticos) intenta mandar recados poco elegantes a tanto la ciudadanía como los políticos disidentes. A la gente le dice que no apoyen estos vende patrias...aquellos que pueden "retornar al país" a la tontera de los años de la UP.

En la misma tónica, Valdés asegura que son los políticos que inducen a las personas a auto-odiarse y que no deben caer en sus trampas. Oh, no, Valdés tiene la receta para la felicidad. Está ocupado buscando "acciones simbólicas que nos distingan" y que nos transformará -queramoslo o no- "en un referente internacional". La solución sería aumentar la grandeza de Chile...mediante una campaña (era que no) interna con un escuálido sitio web HABLAME DE CHILE para que podamos ventilar nuestro self-hate y creer que nuestros aportes serán tomados en consideración.

Estamos seguras de que nos están tomando el pelo. En todo caso, les podemos contar a la brigada de Valdés que las CURVAS llevamos 4 años siendo críticas y auto flagelantes.

Y de paso, también los podemos iluminar con el dato que tanto FOXLEY como Valdés pertenecen a esa casta de políticos que han hecho de la política misma, un chiste.

Todo esto de IMAGEN PAIS nos está oliendo a una vuelta del nacionalismo ficticio, donde no caben los que critican ni los que piensan distinto. Third Reich, anyone?

NEXT en CURVAS: 'Queremos ser ex polola para que nos regalen 15 millones de dólares o El sultán y sus consortes.'

2 comentarios:

Chile Liberal dijo...

El mejor aporte a la imagen país lo ha hecho Michelle Bachelet. ¡Cómo la adoran!

Menos mal que nadie sabe cada vez que sale de un desastre, se manda otro peor.

Andrés David dijo...

Ese último párrafo está perfesto aunque en mi caso pensé en mi país antes que en el Third Reich. La razón: COLOMBIA ES PASIÓN.